Durante muchos años se ha debatido qué es más importante si el producto o el vendedor. Algunos podrían incluso llamar el producto estrella versus el vendedor.
A través del tiempo las marcas que ganaron notoriedad y respeto desarrollaron grandes campañas para lograr el branding adecuado, pero fueron además gestiones de índole comercial y distribución que las catapultaron a convertirse en lo que ahora son.
La tecnología hoy en día ocupa buena parte de este proceso y la llegada de las redes sociales ha amplificado la exposición de las empresas a los consumidores. Sin embargo, sumado todos esos aditamentos no podemos dejar de lado la contribución que hacen los vendedores en el desarrollo de la gestión productiva, es decir sin ellos sería casi imposible llegar hasta el cliente y se logre captar su atención favorable.
Hago este análisis ya que me encuentro gestionando un nuevo producto, en papeles muy bueno, pero que necesita desarrollarse e impulsarse no solo a través de medios publicitarios sino de mucha gestión comercial y en ello radica mi estudio.
Los vendedores o grandes asesores de negocios al parecer se cuentan con los dedos y es una labor bastante dura armar un equipo para alcanzar las metas que la empresa impone.
Hace algunos años comentaba haciendo un símil entre la misión de un DT de Fútbol y un Jefe o gerente de ventas y es casi igual.
Ambos deben conseguir y seleccionar los mejores jugadores para lograr los objetivos y en ese vaivén entran y salen jugadores o vendedores.....la pregunta es lograremos el campeonato o metas??? o nos iremos a la B o no vendamos lo suficiente?
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